lunes, 22 de agosto de 2011

Se cumplen 39 años de los fusilamientos de Trelew, ese oscuro anticipo de lo que vendría

El 22 de agosto se cumple un nuevo aniversario del fusilamiento de dieciséis presos políticos en la base naval Almirante Zar de la provincia de Chubut, tras el frustrado intento de fuga del penal de Rawson ocurrido días antes.

Durante la dictadura militar del general Alejandro Agustín Lanusse, el 15 de agosto de 1972, integrantes del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y Montoneros planearon concretar una fuga masiva del Penal U6 de Rawson, donde estaban detenidos.

En esa acción murió un guardiacárcel y lograron escapar y refugiarse en Chile los jefes guerrilleros Mario Roberto Santucho, Enrique Gorriarán Merlo y Domingo Menna (PRT-ERP), Marcos Osatinsky y Roberto Quieto (FAR), y Fernando Vaca Narvaja, (Montoneros).

El resto, calculado en un centenar de presos políticos, no pudo cumplir el objetivo, y un grupo de 19 fugados quedó en el Aeropuerto por no llegar a tiempo para abordar al avión que habían secuestrado.

En tanto que un tercer grupo no alcanzó a concretar la fuga del penal, según el relato de Fernando Vaca Narvaja, uno de los sobrevivientes.

Ese grupo de 19 se rindió ante las fuerzas militares el 16 de agosto, tras pedir públicamente garantías sobre sus vidas, y fueron trasladados a la Base Aeronaval Almirante Zar de Trelew.
Pero como la violación a las garantías constitucionales es el rasgo distintivo de las dictaduras militares, mientras se efectuaba la negociación Lanusse decretó el estado de sitio desplazando a la justicia y designando como máxima autoridad al jefe de la base militar.

En la madrugada del 22 de agosto de 1972 se los retiró de su celda, se los condujo a un patio y formados en dos hileras los militares dispararon contra sus cuerpos, muriendo dieciséis presos políticos y los tres restantes, gravemente heridos sobrevivieron y aportaron su testimonio a la causa judicial, abierta 35 años después.

Las víctimas fatales fueron Rubén Pedro Bonet, Jorge Alejandro Ulla, Humberto Segundo Suárez, José Ricardo Mena, Humberto Adrián Toschi, Miguel Angel Polti, Mario Emilio Delfino, Alberto Carlos Del Rey, Eduardo Campello, Clarisa Rosa Lea Place, Ana María Villarreal de Santucho, Carlos Heriberto Astudillo, Alfredo Elías Kohon, María Angélica Sabelli, Mariano Pujadas y Susana Lesgart.

En tanto, los tres sobrevivientes de los fusilamientos fueron María Berger, Carlos Alberto Camps y Ricardo René Haidar, que durante la dictadura militar fueron secuestrados y desaparecidos.

Los fusilamientos de Trelew, no sólo dejaron sus marcas de sangre en la base Almirante Zar, sino también en familiares y abogados que defendieron a los presos políticos, con atentados, persecución secuestros y desapariciones.

Entre ellos, los padres y dos hermanos de Mariano Pujadas fueron secuestrados y asesinados por la dictadura militar, dos hermanos de Susana Lesgart están detenidos-desaparecidos, y su padre secuestrado y liberado posteriormente.

En tanto, el padre y el hermano de Clarisa Lea Place fueron asesinados en 1975, y el padre de Fernando Vaca Narvaja, secuestrado y decapitado en marzo de 1976.

Francisco "Paco" Urondo, poeta y periodista autor de "La Patria Fusilada", donde entrevista a los sobrevivientes de Trelew mientras compartía celda en Villa Devoto, muere en un enfrentamiento en Mendoza en junio de 1976.

A los caídos de Trelew, debe sumarse el secuestro y desaparición de Raymundo Gleyzer, realizador del primer film sobre la Masacre, "Ni olvido ni perdón: 1972, la masacre de Trelew".

Rodolfo Ortega Peña, fue junto a otros abogados defensores de presos políticos, entre ellos el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Eduardo Luis Duhalde, víctima de la Triple A, al ser asesinado en 1974.

En 1976, Mario Abel Amaya muere a raíz de las torturas recibidas estando detenido, mientras que sus colegas Roberto Sinigaglia y Mario Hernández, fueron secuestrados y permanecen desaparecidos.

El ex diputado radical Hipólito Solari Yrigoyen -que sufrió dos atentados con explosivos en su domicilio en 1973 y 1975-, estuvo detenido-desaparecido en 1976 por la dictadura militar y luego fue liberado.

Del grupo de dirigentes que había logrado refugiarse en Chile, sólo sobrevive Fernando Vaca Narvaja, ya que Santucho fue asesinado en un ataque armado en su domicilio, Menna secuestrado y asesinado en Campo de Mayo, Osatinsky asesinado en Córdoba, Quieto secuestrado y desaparecido en diciembre de 1975, y Enrique Gorriarán Merlo falleció en 2006 de un paro cardíaco.